domingo, octubre 19, 2008

I Choose (That’s What I Do):

Be aware the pain for my unwillingness to fall, be aware the sadness for my absence of it, be ready the anger to be faced and be aware myself to arise.

For today the decision has been made, destiny is no longer an issue and my self is facing the sun as a hitchhiker facing the long road to walk, ready for anything, aware of the loneliness. So this road be my soul-grave, so this road be my punishment, because if there is a hell…I’ve earned my entrance long time ago.

And this day be remembered for me embracing my road, embracing my role, and embracing my so called fate. The role has been given, the “pain-eater” has been born…no, the “pain-eater” has become aware of his existence, so for this day onwards…on pain I feast.

Because…to fall in pain and reject the experience, to be consumed by the anger and throw yourself into oblivion, to declare war to emotions and lock yourself into hatred…and to give up on life in order to seek peace…

I choose not…

domingo, octubre 05, 2008

Del Peso De Los Días:

¿Dónde habrán quedado esas épocas de calma notoria?, ¿qué paso con las tantas sonrisas alguna vez sobrantes y ahora tan buscadas?, ¿será que siempre debe ser así? No pasa día que no resuene la pregunta… ”¿por qué?”…y no pasa día en que la respuesta es mas elusiva aun, elusiva…perdida tal vez, inexistente creo al final de cuentas.

No es lo mismo…nunca lo es…no tiene porque serlo, pero…a veces uno solo desea poder detenerse por un segundo sin ese pesar, sin esa pesadez en los brazos, en las piernas y sobre todo en el alma, esa pesadez que solo hace mas difícil el avanzar, esa pesadez soldada a la consciencia, consciencia al tanto de todo y mas que todo…consciente de “esa” verdad callada.

Camino largo y sinuoso, camino de nunca acabar, pero como saberlo si no se divisa, los ojos ya están secos y cansados como para divisarlo, ojos que han quedado prendados a las visiones del pasado, ojos que no pueden ver mas allá…y si estos no habrán de ver el camino; difícil será pensar en alguna meta.
Entonces de un rato al otro me siento a un lado del camino, veo pasar el tiempo y veo pasar la vida, tomo un respiro con cierto sabor a resignación y me levanto…no es lo mismo…nunca lo es, no tiene porque serlo…pero, ¿por qué continuar?, caer rendido aparece como tan buena opción como la de seguir y mejor aun…pero algo lo evita y continuo.

No pienso en una meta, no pienso en un “llegar”, ya la idea de acabar con esto es cada vez mas lejana, tal vez solo sea el instinto que mueve a no parar hasta el ultimo suspiro…suspiro…y camino. ¿Acaso para parar alguna vez?, la respuesta no la conozco pero el camino se hace cada vez mas familiar, pero…no es lo mismo…nunca lo es…y no tiene porque serlo.