Conocí a Nía hace tiempo ya, yo aun estaba en colegio y no prestaba atención a quien conocía o a quien no pues el tiempo más lo pasaba preocupado de otras cosas. No recuerdo exactamente el día que la conocí, pero si recuerdo que no pensé que iba a quedarse mucho tiempo por acá, pensé que era de esos personajes que pasa por la vida de uno como el viento por la ciudad…cuan equivocado estaba.
Yo tenia como 14 años y solo recuerdo que la primera vez que la conocí no le preste atención, tenia mis propios problemas y no tenia tiempo de andar haciendo amigos, claro que Nía pensaba lo contrario y a partir de ese momento paso a tener un rol muy importante en mi vida. Si bien nunca me di cuenta, ella se la pasaba cerca mío, yo no lo notaba pero sabía que había algo más, siempre algo más…no sabía que era ella.
Ya para la época en que salía de colegio, Nía ya había dejado su marca en mi persona y en algunos de mis amigos, empezaba a conocerla mejor, pero aun así no la asociaba a ese personaje que conocí tiempo atrás. Mis amigos y yo pensábamos que era alguien especial, para haber dejado su marca en tantos de nosotros, alguno de ellos trato de acercarse mucho a ella…alguno lo logro…los demás no, era peligrosa…pero aun así no la veía como alguien muy cercano…aun.
Por el espacio de los siguientes 4 años ella se alejo, no lo supe hasta después que eso fue lo mejor que me había pasado, con ella lejos las cosas no se complicaban tanto. Ese periodo debo agradecérselo a Jana por evitar que Nía se acercara a mi…lastimosamente…yo no pude evitar que Nía se acercara a Jana. Para resumir…Jana acabo alejándose gracias a la intervención de Nía y ella volvió a acercarse a mí.
Por mucho tiempo Nía y sus celos evitaron que pueda acercarme a otra persona, entonces yo evitaba contacto con otras persona para evitar que Nía pueda hacerles algo. A veces…parecía que Nía se rendía y desaparecía de mi vida, pero eso solo era una fantasía que yo me contaba para seguir adelante, tal vez se escondía o a veces estaba de viaje, pero siempre volvía…nunca se alejaba mucho.
Un día conocí a Doida…y milagrosamente…Nía se alejo por su cuenta, no hizo nada y se fue, yo pensaba que eso era increíble y que no podía haber tenido mas suerte…otra vez…que tonto fui. Doida tenia en mente sus propias maquinaciones, no se si Nía lo sabia y simplemente estaba jugando…solo se que cuando Doida se fue, Nía volvió a mi lado, entonces pensé que la única compañera que podía tener alguna vez era ella.
Ahora trato de sobrevivir a la sombra de Nía, no hay día que no intente alejarme de ella…pero ella regresa cada vez, no retrocede. En esos días que se aleja un poco, o no anda atenta…trato de disfrutar la libertad que me deja, aunque de un tiempo a esta parte esos días son menos y ella regresa rápido, como si me preguntara; “¿Pensaste que me había ido?” en tono sarcástico.
Ya solo me pregunto si alguna vez se ira de mi lado…o si es y será mi pareja eterna…ay Nía Léntago Nía Léntago… ¿por qué tuve que conocerte?
